“Apoyamos al BancoEstado en la implementación de créditos especializados en este tipo de proyectos para micro y pequeña empresa. Además, promovemos la consolidación en Chile de empresas de servicios energéticos (ESCO). La ESCO realiza la inversión inicial y  suscribe un contrato a largo plazo con la empresa (generalmente de 10 a más años), periodo en el que opera y mantiene el sistema y la empresa le paga por la energía que produce a un valor que puede ser inferior a la tarifa de electricidad de la empresa distribuidora”.

El buen uso de la energía y el despliegue de las energías renovables son medios para un desarrollo sustentable en todas sus dimensiones: económica, social y ambiental. Cada vez son más las empresas que aportan a ese tipo de desarrollo con sus buenas prácticas y responsabilidad social, lo que es valorado por la sociedad y sus clientes. Hoy es posible desarrollar proyectos de eficiencia energética y energías renovables rentables, que reducen el gasto en energía y aumentan la competitividad de las empresas.

Sin perjuicio que reducir el consumo de energía con medidas de eficiencia energética debería ser una tarea permanente de las empresas, en estas líneas me concentraré en proyectos de energías renovables instalados directamente en las dependencias de las empresas, para  autoproducir parte de la energía que demandan. Hoy el autoconsumo de energía es tendencia mundial, cada vez son más personas, empresas y comercio que están generando su propia electricidad para  autoconsumo, principalmente por medio de sistemas solares fotovoltaicos.

En Chile ya tenemos más de 1.600 conexiones adheridas a  la Ley 20.571 de Generación Distribuida, que además permite que los excedentes que no se consumen en la empresa se aporten a la red de distribución, se valoricen al mismo precio que el cargo por los consumos de energía, y que se descuenten de la factura eléctrica.

Para promover la utilización de energías limpias, como es el caso de estos proyectos, el Ministerio de Energía ha creado diversas herramientas de información. Una de ellas es el “Explorador Solar”, donde se puede calcular en línea la producción de energía de un sistema fotovoltaico en la localización exacta de su empresa. Como Ministerio también realizamos evaluaciones gratuitas de prefactibilidad de sistemas fotovoltaicos en empresas interesadas.

Si bien el precio de las tecnologías que generan electricidad con energía solar ya es competitivo, sabemos que realizar la inversión inicial puede ser una barrera para algunas empresas. Es por eso que apoyamos al BancoEstado en la implementación de créditos especializados en este tipo de proyectos para micro y pequeña empresa. Además, promovemos la consolidación en Chile de empresas de servicios energéticos (ESCO). La ESCO realiza la inversión inicial y  suscribe un contrato a largo plazo con la empresa (generalmente de 10 a más años), periodo en el que opera y mantiene el sistema y la empresa le paga por la energía que produce a un valor que puede ser inferior a la tarifa de electricidad de la empresa distribuidora. Al término del contrato, la empresa se queda con el sistema y se beneficia del 100% de la energía que produce por el resto de su vida útil, que supera los 20 años en el caso de sistemas fotovoltaicos.

Hasta fines de agosto de 2017  las empresas que han aprovechado la Ley 20.571   en Chile son 63 relacionadas con el comercio, 73 con la agricultura y 32 industrias. Las condiciones ya existen para desarrollar proyectos de autoconsumo con energías renovables, pudiendo las empresas mejorar su competitividad y contar con una nueva manera de contribuir a la sociedad y al medio ambiente.

Por Christian Santana, Jefe de la División de Energías Renovables, Ministerio de Energía